EL CÍRCULO DEL ODIO
El dueño de una empresa le grita al administrador porque estaba enojado en ese momento.
El administrador llegó a su casa y le gritó a su esposa, acusándola de gastar demasiado al verla con un vestido nuevo.
La esposa le gritó a la empleada porque rompió un plato.
La empleada le dio un puntapié al perro porque la hizo tropezar.
El perro salió corriendo y mordió a una señora que pasaba por la vereda, porque obstaculizaba su salida por la puerta.
Esa señora fue al hospital a vacunarse contra la rabia y le gritó al joven médico porque le dolió cuando le aplicó la vacuna.
El joven médico llegó a su casa y gritó a su madre porque la comida no era de su agrado.
La madre le acarició los cabellos diciéndole:
«Hijo querido, mañana haré tu comida favorita. Tú trabajas mucho, estás cansado y necesitas de una buena noche de sueño. Voy a cambiar las sábanas de tu cama por otras bien limpias y perfumadas para que descanses con tranquilidad. Mañana te sentirás mejor».
Luego lo bendijo y abandonó la habitación, dejándolo solo con sus pensamientos…
En ese momento, se interrumpió el círculo del odio, porque chocó con la tolerancia, el perdón y el amor.
Si has ingresado en un círculo de odio, acuérdate que con tolerancia, y disposición al perdón y sobre todo, con amor, puedes romperlo.